Todas las personas tenemos derecho a encontrar el amor y a compartir nuestra vida con una persona a la que amemos y que a la vez nos ame.
El amor hace florecer a la persona, y trae gran felicidad a la vida, aparte de ser una maravillosa herramienta de aprendizaje. Recuerda que con nuestra pareja, también tenemos cosas que aprender.
Si eres mujer y deseas encontrar el amor de tu vida, ten en cuenta que no debes conformarte con menos de lo que deseas y necesitas.
Pide un hombre que sea así:
Un hombre que te diga:»Estoy enamorado de ti y quiero estar contigo».
Que para él seas más bonita que las demás mujeres y que solo tenga ojos y piropos para ti.
Que te pida que seas su mujer.
Que te diga:»Eres la mujer de mis sueños y lo mejor que me ha pasado en la vida»
Que sea cariñoso y atento, y que aparte de tu pareja sea también tú mejor amigo.
Que sea romántico y detallista, y que te regale flores y bombones por San Valentín y en cada fecha señalada.
Que te presente a sus amigos y familiares sintiéndose orgulloso de la mujer que tiene.
Que en caso de existir inconvenientes relacionados con la distancia geográfica, remueva cielo y tierra para estar contigo.
Que te trate como una joya de gran valor
Y por supuesto que te sea fiel por siempre y que no te cambie por ninguna.
No permitas que algunas personas te hagan sentir rara, anticuada, inmadura o infantil por desear un amor así. Tampoco permitas que te deseen mal y te digan que ese tipo de chicos no existen, porque no es cierto. Si lo hacen, te están dando la información que necesitas:
ESAS PERSONAS NO TE QUIEREN.
Y en tu vida, no te hace falta la compañía de personas que no te quieren.
Te recomiendo encarecidamente que en el camino a encontrarlo, no aceptes amistades con derecho a roce, ni tratos carnales, ni sigas el mandato de divertirte con el hombre equivocado hasta que aparezca el hombre adecuado.
Esto te lo digo por dos motivos:
a) Porque él solamente tendrá que sentirse responsable de las expectativas que se ponen en un amigo, en vez de las expectativas más altas que se depositan en una pareja.
b) Porque serás un plato de segunda mesa, es decir, una amiga con todas las ventajas de una novia, a quien puede ver y dejar de ver cuando a él le apetezca.
Procura invertir mucho tiempo en ti misma, en tu crecimiento personal, en mantener una buena integración aplicando todos los principios de psicointegración que ya conoces, y en no bajar nunca tus expectativas.
Si a un hombre le interesas de verdad, no habrá inconveniente que se interponga en su camino, y no va a poder evitar involucrarse en una relación amorosa contigo, comprometerse y pedirte matrimonio, por muy malo que haya sido su pasado, por muchas heridas de relaciones anteriores que tenga, por muy traumático que haya sido el divorcio de sus padres o por mucha distancia geográfica que haya entre vosotros.
Cuanto mas te valores a ti misma, más posibilidades tendrás de encontrar el amor que mereces.
Texto elaborado por Karsa-El