Médium: Raúl Caballero
Entidad: Ensirnom-El (Thetan de Juan Carlos M.)
Interlocutor: Juan Carlos M.
PARTE 1
El Thetán dió un largo mensaje donde se comentó de la importancia que podría llegar a tener la mediumnidad en el futuro (aplicaciones médicas, arqueológicas, policiales…), pero hay que realizarla con equilibrio, pues, de lo contrario, se puede pagar con grandes problemas de salud (habló sobre un principio alquímico). Habló sobre la importancia de divertirse y desconectarse de nuestro día a día, pues hacerlo así recarga nuestras energías. Luego relató una vida en Alburex III. Allí vivio una vida de guerrero y de romanticismo. Se divertía luchando. En un viaje de exploración a una isla desierta, fueron abordados por una bestia marina fantástica de tres cabezas que hundió el buque. Los supervivientes llegaron a la isla. Se divertían luchando y matándose entre ellos, pues temían morirse de aburrimiento.
PARTE 2
Al principio, finaliza el relato de la 1ª sesión del “fecha”. Luego, se entabla un debate entre la entidad y su 10%. Se habló de la supuesta perfección de Eón. Por último, relata una vida en China como monje. Sus enseñanzas llevaron a la muerte a sus seguidores, explicando lo malo que es el dogmatismo.
PARTE 1
Ensirnom-El: No hables. Ahora mismo -querido 10%- no hables. Me gustaría transmitir unos datos que yo considero importantes, aunque eso es a gusto de cada uno. Voy a decir solamente que la mediumnidad se podría utilizar muy buenamente en un futuro, en un futuro no tan lejano, pero vamos, que dudo que vosotros personalmente lo lleguéis a conocer. Que la mediumnidad se utilizara médicamente para chequear, analizar tanto la progresión de un paciente como cómo se encuentra. Problemas terminales, problemas que puedan ocasionarse debido a equis circunstancias con el tiempo. Y sería muy bonito que la mediumnidad se llegara a desarrollar a ese nivel médico pasado un tiempo. Claramente, es tan interesante la mediumnidad para el futuro, que vosotros ahora mismo no tenéis la imaginación suficiente como para poder saber qué pasará en un futuro. Hablo como si supiera el futuro. Tal vez lo sepa, tal vez lo sepa. Pero no hablo de que sepa o no sepa el futuro, solo hablo de una idea que sería -bajo mi punto de vista- bonita, interesante.
La mediumnidad se puede aplicar para todos los medios. Se puede aplicar para la medicina, se puede aplicar en las prisiones, en las investigaciones científicas, en las investigaciones argueológicas -que bien también es una ciencia-, en las investigaciones paranormales, en las investigaciones policiales… Estoy hablando de algo que ahora mismo sería imposible -y esto lo sabéis-, es impensable. Pero, ¿y el futuro? ¿Quién sabe el futuro? Sería interesante. Me gustaría verlo. Me gustaría que eso sucediese porque significaría un avance en todos los sentidos de esta humanidad. Que es difícil es incuestionable. ¿Que luchando juntos podemos conseguirlo? Es prácticamente imposible. Generaciones y generaciones. Tal vez con el tiempo lo veamos y si lo vemos, percibamos una nueva cosa o la veamos desde un nuevo rol, tal vez terrestre, tal vez no. Lo que también me gustaría decir es que antes de cada sesión el espíritu encargado y/o presentado para responder o para orientar, sería interesante que hiciera un chequeo, un escáner importante del cuerpo físico del que en ese momento puede sufrir algo, que en este caso siempre es el médium. ¿Me entiendes?
Interlocutor: Sí.
Ensirnom-El: Porque el médium en los momentos de una canalización puede incluso sufrir un ataque de diversas índoles. Una canalización para vosotros es algo paranormal, para nosotros es algo de lo más normal, pero sigue sin ser del todo segura. Un médium ha de estar bien emocionalmente, físicamente. Y hay dos médium en estos momentos que están canalizando y que tal vez le deberíamos prohibir, no nos deberíamos presentar. Que es este receptáculo y otro. Los dos han pasado por situaciones malas emocionalmente hablando. Y fíjate, los dos tienen la culpa de que al otro le haya sucedido lo que le haya sucedido. O bueno, o la responsabilidad. No me gustaría aclarar el qué, porque la discusiones que ocurrieron hace un año yo creo que fueron inevitables, por desgracia. Pero actualmente, sea como sea, ninguno de los dos médium… y eso que ahora mismo hacen sesiones con buena fidelidad, pero físicamente tienes que pagar un precio. Hay una ley de alquimia que dice: Si quieres conseguir algo, vas a tener que sacrificar algo del mismo valor. En Alemania se practicaba muchísimo la alquimia, considerándose como científico y había una ley que decía eso, que si quieres algo vas a tener que sacrificar algo del mismo valor. Hay obras actualmente escritas y dibujadas que narran historias -algunas de ellas reales, otras no- en que ha habido alquímicos que han tenido que sacrificar su propia vida para conseguir algo que han estado buscando. Perder partes importantes para ellos. Esa ley es totalmente cierta, pero no en la alquimia, en la vida. Si quieres algo, vas a tener que sacrificar algo del mismo valor. A eso se le llama la Ley del Intercambio Equivalente. Ese intercambio existe con todo en esta vida. Con todo, con todo. Si ese médium tiene un alto nivel de fidelidad -aunque suene hostil lo que vaya a decir- va a tener que pagar por ello. Va a tener que pagar un esfuerzo, va a tener que pagar un tiempo y ¿por qué no? Puede ser que tenga que pagar con salud. Qué triste, pueden decir algunos. No es triste, es y ya. Es y ya. Yo no soy nadie para juzgar si es triste o no, preguntémosle a Eón por qué creó esa Ley tan realista del Intercambio Equivalente. Algunos dirán que eso es justo. Yo voy a decir humildemente que este querido receptáculo es un genio en las canalizaciones a su corta edad y que no le ha salido gratis, que ha tenido que pagar un esfuerzo. Que tú, querido 10%, eres muy bueno en muchísimas cosas y que sabes que no te han salido gratis. Puedes tener una destreza, pero te toca pagar el esfuerzo para lograr después los resultados a pesar de tener una destreza.
Ley, para vosotros la palabra ley es coartar. Para vosotros la palabra ley es prohibir, para vosotros el equivalente a ley es prohibición, pero hay leyes en la ciencia, en la química, en la física, que son inquebrantables y que no prohíben absolutamente nada, pero sí existen. Vosotros mismos necesitáis alimentaros, exigís alimentos para poder vivir. Un descanso y fíjate, algo más importante todavía que todo esto. ¿Cómo? ¿Más importante que alimentarse y más importante que descansar? Sí, vosotros necesitáis de una cosa que se llama diversión, porque hay glándulas en vuestro cuerpo, en vuestra mente, que os piden diversión, os exigen para poder vivir y la gente que no se divierte se amarga y la gente que se amarga, muere. Desencarna. ¿Por qué se necesita eso? ¿Por qué Eón puso eso? Como también es importante el sufrimiento, ¿y por qué es importante el sufrimiento? Porque nos ayuda a aprender que no todo es de colores.
Entended de una vez por todas, hay médiums actualmente que dedican las 24 horas del día a alimentarse, a descansar y a canalizar. Hay un dato real, escrito, que si lo investigáis veréis que es así, que ahora mismo no sé el porcentaje exacto, pero que un elevado porcentaje, creo que era más de un 80% -ahora no tengo el dato exacto porque no estoy con ello- de los médiums desencarnan jóvenes, muy jóvenes. ¿Problema? Yo se lo advertí a este receptáculo. Yo y Ron y muchos otros. Que dejara tanta canalización porque le iba a hacer daño. Conozco de gente que todavía no ha hecho caso de esto y no me gusta poner mal a nombres de médiums que siguen haciendo lo que no deben. Este receptáculo sí ha hecho caso. ¿Pero por qué se lo dijimos? Hay tantos médiums que se fanatizan, que canalizan las 24 horas sin parar, que no se divierten… y ahora el problema viene no ya por si se alimentan o duermen, pero no se divierten. Pero no se tiran la pelotita de energía que tienen algunos planetas para divertirse simulando a dos deportes vuestros como pueden ser el baloncesto o el fútbol. No ven ese instrumento vuestro llamado televisión que tan mal aplicado está en muchos casos y que tan poco considerado está en otros, porque puede ser una absoluta necesidad. Y ocurre con muchísimos médiums y ocurre también con gente que no es médium y fíjate, fijaos todos, ocurre también con gente que trabaja, viene, come, se vuelve a trabajar, viene, cena, duerme y luego los ves parados en una tienda comprando y: Déjame estar. De mal humor, amargados, tristes. Esa gente dura poco, porque no tienen activadas las glándulas de la diversión. Es una sustancia que segrega el cuerpo. Y a veces hay otra sustancia que es tan importante o más que esa, que es la famosa adrenalina. Afortunadamente actualmente existen formas de diversión u ocio que favorecen a segregar adrenalina sin poner en riesgo ningún tipo de vida. Es necesaria también la adrenalina y no acostumbrase a vivir una vida monótona, tranquila y aburrida. Y esto quiero que quede bien claro para que todos esos que solamente piensan en trabajar fanáticamente entiendan esta cosita que voy a decir, que tal vez muchos maestros me la cuestionen, que puede ser que tú mismo -querido 10%- me la cuestiones, no lo dudo, pero voy a decirlo.
Querida gente, trabajad lo justo para vivir. Divertíos el resto. Puede sonar fatal, puede sonar a irresponsable, me da igual a lo que suene. ¿Pero sabes por qué? Porque vosotros no sabéis a lo que habéis venido aquí. ¿Qué tenéis facilidades con la comunicación entre vosotros? Jajaja. Me río de eso. Me río porque no hay ningún médium que ahora mismo pueda traducir el 100% de mi concepto, por lo tanto nunca vais a saber quiénes sois verdaderamente ni por qué estáis aquí ni de dónde venís. Nunca lo vais a saber. Limitaos a vivir la vida las 24 horas apaciblemente, con armonía, con tranquilidad, pero también con diversión, con adrenalina y con placer. ¿Que hay que llevar un trabajo? Sí, es necesaria la responsabilidad para sentirse bien uno con uno mismo y para poder servir al otro, pero que esa responsabilidad no os chupe, no os devore, porque entonces olvidaréis lo que es la diversión y la añoraréis, porque es necesario las dos cosas. ¿Y hoy en día los empleos qué precisan? 8 horas diarias, 7, 6, 9… Bueno, ya tenéis tiempo de sobra para vuestra responsabilidad ahí. Divertíos, divertíos. Fijaos lo importante que tenéis en esta vida, la diversión, que muchos no valoráis. Esto es un mensaje para todos aquellos adictos al trabajo.
Interlocutor: Jeje, entiendo.
Ensirnom-El: Querido 10%, libérate. Es el último consejo que doy de momento, porque luego paso a la descarga. ¡Libérate, querido 10%! No le des tantas vueltas a los conceptos. Es un consejo que te he dicho y que le doy también a este querido receptáculo porque sois dos cabezas duras.
Interlocutor: (Ríe).
Ensirnom-El: Y aunque os gusta, también sabéis que tenéis vuestra diversión, pero pensáis demasiado, calculáis demasiado, razonáis demasiado. Hay gente que no se pregunta tantísimas cosas. Bueno, vale, que no tienen el gusanillo de investigar. O sí que lo tienen, pero simplemente saben vivir equilibradamente. Yo también soy un espíritu que me debería aplicar el cuento. Esto que he dicho no lo he dicho yo, me lo han transmitido. Y no hay más, me lo han transmitido. Y entre los espíritus que me lo han transmitido está el querido Maestro Jesús. Porque él entiende que la responsabilidad es importante, pero también entiende que no podemos vivir el día atados. Que tenemos que -como dicen frases vuestras- desmelenarnos. Salir a la calle y mostrar nuestro cuerpo al desnudo. Que se entienda eh, que se entienda. (Risas). No vayáis a hacer luego la locura de… (Risas). No digo que vayáis a hacer nudismo. (Risas) ¿Entiendes lo que quiero decir? Salid, comeros el mundo, pero dejad que se os coman también a vosotros, apaciblemente hablando (Risas). No queráis ser el centro de atención de todo. Dejad que por el momento sea el centro de atención una pelota o una televisión, que los pobres son objetos y no tienen atención, dejad que sean atención. Es muy bonito tanto divertirse haciendo deporte como… bueno, puedes estar cansado y puedes divertirte de otras muchas maneras, ¿no? Te sientas tranquilamente y ves lo que te gusta. Y soy consciente que actualmente los deportes tienden, porque vemos muchísimos actos hostiles en ellos, porque la competitividad a veces es convierte en irracional y por ganar te rompo la pierna y. Y vas al hospital y a lo mejor no vuelves a pisar un terreno de juego en dos, tres años. Y sé también que dentro de sentarse y vivir un ocio normal a veces veis en la televisión mucha telebasura como le llamáis vosotros, que por desgracia está muy mal interpretado todo, pero es lo que pasa cuando se mueven los hilos de la sociedad. Tú lo sabes mejor que nadie. No mejor que nadie, ojito, que esa frase que he dicho puede sonar a egoica.
Tú lo sabes muy bien porque investigas temas y sabes que por desgracia donde se manejan los hilos de la sociedad en su mayoría son corruptos. Amargados irracionales. Pero ojo con la palabra que dije, AMARGADOS. Y no os convirtáis en amargados, por favor. No seáis -mi respeto a los viejecitos- viejecitos que echan broncas a todo el mundo porque formen un poquito de ruido. Sed más -y vosotros decís una palabra que a mí me hace mucha gracia- modernos. Me hace mucha gracia porque no existe el modernismo, es una palabra que la habéis inventado vosotros y, bueno, la empleo porque para vosotros está bien, es comprensible. Sed más irracionales, vivid sin preguntaros por qué de algunas cosas. A veces esa desconexión -que no la tenéis- puede ayudar a reactivar vuestros chakras mucho más que 12 horas de descanso. A veces te notas cansado y te piensas que lo que necesitas es dormir, es descansar, pero no, ¡no!. Y hay gente que después de dormir se despierta y dice «sigo tan cansado o más que ayer». Porque lo que necesitas querido amigo es diversión, porque estuviste las 24 horas del día anterior en la oficina entre papeles y ahora necesitas, no dormir, sino desconectar. Que te limpien los chakras. Algo que te guste. Pero siempre algo que te guste. Que tampoco apoyo a los jóvenes que influenciados por sus grandes colegas del alma hacen lo que les dicen aunque no les apetezca, porque entonces, tanto estás siendo indigno -lo estás convirtiendo en un acto hostil hacia ti mismo- y además no te estás divirtiendo. Y tal vez esté filosofando y tal vez no debiera, pero es que tuve una vida similar, entonces lo he aprovechado para dar este mensaje. Tomad todos este mensaje, ¡todos! Y bueno, por favor, para terminar: Nunca os vayáis a la otra esquina, la de dejar de lado el compromiso y la responsabilidad únicamente por divertirse. Eso también está muy feo.
Interlocutor: Te entiendo.
Ensirnom-El: Y por desgracia también lo hace una parte de la población. Ni hay que hacer una cosa ni hay que hacer la otra, hay que tener equilibrio en todo. Estáis hartos ya de escuchar la palabra equilibrio de los labios de este receptáculo y de otros receptáculos que han estado cercanos a él, porque nosotros los maestros siempre estamos repitiendo lo mismo y somos pesados ya (Ríe). Pero es que no la entendéis esa palabra ni aunque la repitamos cien veces más. No lo digo por nadie de aquí presente, eh. Eso lo aseguro. Hablo a la sociedad, hablo del planeta. No lo entendéis. Ahora bien, tú querido 10%, ¿sabes lo que es el equilibrio? Es una pregunta. Y tú seguramente me vas a responder con la respuesta, que bueno, que es real, ¿no? Porque tú sí sabes lo que es el equilibrio, si bien no siempre lo apliques. Pero bueno, saberlo lo sabes; otra cosa es que luego se aplique o no. Lo importante es el concepto dicen. Bueno, pues ahora demuéstralo, ve a la plaza. Sé valiente (Ríe). Como decís vosotros, haciendo apología a algo de lo más triste que tenéis en el planeta, hablando de la plaza de toros; hablando de algo de lo más triste que tenéis vosotros.
Interlocutor: Sí, actos hostiles a un animal. Pobre animal, de verdad. Es aberrante.
Ensirnom-El: Pero no quiero hablar de toros porque no tuve ninguna vida con toros ahora mismo (Ríe). Tengo una vida que sí, por culpa de seguir mis ideales y de no hacer caso a gente que me decía lo contrario, gente que podía saber más o podía saber menos, me llegué a topar con un pilar que se me cayó encima y me mató, hablando metafóricamente (Ríe). Y ese pilar fue el aburrimiento. ¿Vosotros sabéis lo que quiere decir esa frase vuestra que dice «morirse de aburrimiento? Porque yo lo he podido vivir en otras vidas y te he transmitido a través de vidas el mismo sentimiento aplicado a que tú por ejemplo ahora tratas de llevar más equilibrio. Bueno, todo viene gracias a que se aprende de vidas anteriores, ¿no? Pero ahora veo que tal vez mi 10% no hace todo lo que debería y pienso en esa vida y pienso en todo lo triste que tiene esa vida y me entran ganas de llorar, si tuviera un cuerpo físico.
Interlocutor: ¿Mi vida dices? ¿Es muy triste?
Ensirnom-El: Sí, porque he tenido siete vidas que he tenido una sensación tan grande de soledad unida a aburrimiento que, ¿tú sabes lo que quiere decir perderse en un bosque o perderse en una cueva o perderse en una isla desierta estando solo sin tener nada más que lo básico para sobrevivir -alimento- y morirse por soledad? ¿Y no morirse porque te falta comida, sino por soledad? Pues…
Interlocutor: Es que ahí es muy específico también…
Ensirnom-El: Eso es, eso es y es tan importante lo que estoy diciendo o más que vuestros alimentos físicos, porque tú puedes vivir con un buen manjar al día, ¿pero cuántos reyes o gobernantes hay que se levantan y tienen un gran manjar, pero se van a su habitación privada a llorar porque se sienten solos? Y vosotros no lo sabéis, pero hay un montón. Y de gobernantes anteriores y de épocas de la Edad Media y de épocas de Napoleón también, ¡y el propio Napoleón también! Es decir, tendría tantísimos ejemplos por dar que nunca explicaría mi vida y, ¿qué mejor que explicar mi vida para poder dar ejemplo? Yo tuve una vida hace muchos siglos atrás en lo que vosotros consideráis la Edad Media en otro planeta, pero que en estos momentos siguen viviendo en esa Edad Media. Vamos, un planeta que no avanza. No es Aldebarán, eh, y no es ningún planeta de los que ya conozcáis; es un planeta nuevo para vosotros, bastante familiar para mí porque he encarnado cinco veces en él y de las cinco veces, las cinco he desencarnado por soledad, por aburrimiento. Pero es una Edad Media constante, pero fíjate que encarné hace siglos ahí.
Interlocutor: ¿Cómo se llama el planeta?
Ensirnom-El: El planeta pronunciado en vuestra lengua se llamaría Alburex y sería totalmente pronunciable para vosotros. En nuestro idioma sería Alburex y el número sería III, sería Alburex III. Y en Alburex III es una vida constante de romanticismos. Vosotros sabéis que, si tenéis conocimientos de la Edad Media de vuestro planeta, había muchísimo romance en esas épocas.
Interlocutor: Sí, sí.
Ensirnom-El: Y que los romances, muchas veces la gente moría por romances, porque tú no podías echarle el ojo a una princesa importante de imperio, una persona importante… porque ibas directamente a la ejecución. Y en ese planeta no hay ninguna diferencia al respecto. Hay muchísimo romance, muchísimas muertes en ese sentido. Es más bien una Edad Media de romance, más que una Edad Media de guerras, porque vosotros conocéis las Cruzadas y las Cruzadas fueron por desgracia uno de los hechos más abominables de vuestro planeta, pero en este planeta no ha habido tantas guerras. Era un mundo de guerras psicológicas y de guerras amorosas. Yo era una persona corriente, no tenía nada del otro mundo. Esta vida sería la cuarta de las cinco vidas que tuve en ese planeta, por orden cronológico. Tuve tantísimos desengaños… De pequeño, con 10, 11 rotaciones planetarias -que no hay mucha diferencia, tal vez 14 o 15 años vuestros- y yo era masculino y tenía tantísimas mujeres fichadas que podría formar un equipo de fútbol (Ríe).
Interlocutor: Dame alguna (Ríe).
Ensirnom-El: Fichadas, pero luego no me comía un rosco, como decís vosotros. No logré nada, tuve desengaños, desengaños, desengaños… Y esta vida la estoy relatando de una manera bastante impersonal, porque ni siquiera me está afectando. La vivo, la descargo, la veo conflictiva, pero no dejo que me afecte por mi capacidad de discernimiento, ¿no? Entiendo que es un poco estúpido eso. Yo tenía un hobby, hobby es lo que yo estaba diciendo hace nada, esa palabra que vosotros utilizáis venida del english. Ese hobby que yo tenía en mi tiempo libre era ni más ni menos que la lucha, pero la lucha a veces puede hacer daño y lo sabéis que puede hacer daño, sobre todo si luchas con espadas o con objetos afilados.
Me gustaba la esgrima directa a vida o muerte, me gustaba la adrenalina, justo lo que estaba diciendo antes.
Interlocutor: ¿Eran luchas a vida o muerte?
Ensirnom-El: Eran luchas a vida o muerte.
Interlocutor: Puff.
Ensirnom-El: ¡Más diversión! ¿Por qué dices «puff»? ¡Más diversión? Era lo que pensaba (ríe). Y en esta vida actual estaba diciendo que hay hobbys y que hay ocios que permiten descargar adrenalina sin poner en peligro tu vida. Bueno, okey, pues a mí me gustaba poner en peligro mi vida y más de una vez estuve a punto de morir y tenía cicatrices por todas partes, pero éramos fuertes también. Un día recuerdo que me estamparon una roca pesada en toda la cabeza, pero bueno, teníamos protecciones y éramos fuertes también. Nosotros podíamos ejercer una presión agarrando del cuello que a cualquiera de las personas más fuertes de vuestro planeta no aguantarían ni 5 minutos, porque hacíamos una gran presión con las manos, con los brazos. Teníamos muchísima fuerza, podíamos hacer pedacitos algunas de vuestras piedras simplemente con apretar la mano, pero para nosotros no era lo mismo porque también teníamos más resistencia.
Interlocutor: ¿La raza era homos sapiens sapiens?
Ensirnom-El: Éramos totalmente homo sapiens sapiens con los mismos órganos, las mismas articulaciones, con un cabello muy largo, llegaba casi hasta el trasero, con unas barbas bastante prolongadas, con una nariz bastante punzante y con unos músculos que bueno, vosotros diríais que son como dos armarios vuestros.
Interlocutor: Como los de Conan el Bárbaro.
Ensirnom-El: Conan el Bárbaro (ríe), es una idea, pero no es Zimmer, el planeta donde está ambientado Conan, es otro planeta. En este planeta yo he vivido aventuras cada vez que he encarnado, por eso me ha gustado y en esta vida estuve a punto de morir varias veces. Una vez me clavaron la espada cerquísima del corazón, porque teníamos y tienen todavía esos seres corazón como los vuestros. Cerquísima pasó. Yo entrenaba porque me gustaba y no era más que mi ocio y luego me alisté al ejército profesional, allí el ejército se llama la BUE, que para nuestro idioma sería algo así como la asociación de guerreros -¿cómo lo diría?- valientes, ¿no? O una palabra así sería la vuestra, que van a la guerra pero para morir. Yo estaba alistado para hacer guerras, he dicho que había pocas guerras, afortunadamente a lo mejor me hacían ir una vez por año. No era mucho porque bueno, en vuestras épocas de guerra eran días y días constantes de guerra. Eran pequeñas guerras para ampliar los frentes, alguien que se revelaba, algún grupo. Bueno, era ocasional, pero en mi tiempo libre también peleaba, me gustaba mucho, pero mi mayor ocio era coquetear con jóvenes doncellas. Me gustaba mostrar mi fuerza, mi carisma, pero me decían que precisamente carecía de carisma y nunca logré nada y de ahí arrastramos engramas tú y yo a nivel emocional afectivo con mujeres. Tú y yo arrastramos engramas de esa vida.
Interlocutor: Sí, sí, te voy entendiendo.
Ensirnom-El: Y el engrama más grande que arrastramos es que tuve una anécdota con el tiempo, fui enviado a un grupo de reconocimiento de una zona que estaba bastante alejada. El planeta es, para que te hagas una idea, un gran continente como vuestra Europa, América y África unidas, como todos los continentes unidos prácticamente, pero con una pequeña isla en la parte sur este si imaginamos el planeta plano, ¿no? En la parte sur este.
Interlocutor: Perdona, este carisma, que te falta carisma, ¿no era por tener labia, verso, romance?
Ensirnom-El: El problema era que teníamos muchísima fuerza bruta, pero muy poca inteligencia, algo que ahora no es así y bueno, las doncellas estaban generalmente todas solas, no les gustaba tener compromisos. No me preguntes cuál era la idea femenina de esa época, de ese planeta, pero no tendían a tener esos compromisos. Bueno, la cuestión es que fui a esa isla apartada como exploración. ¿Era la isla tal vez prohibida? Nunca nadie había pisado esa isla. Podíamos ir con buques, podíamos ir con barcos de transporte pesados, pero no teníamos la seguridad de poder volver. Algunos de los que habían ido nunca habían vuelto y es que hay seres que para vosotros se os escapan a vuestra comprensión, porque es cierto que en esa parte de mar habita un -y así corría el rumor, la leyenda-… como un gran dragón marino, que seguramente devoraba todo lo que pasaba por ahí, hacía trizas los barcos y devoraba a la gente. Yo no creía en esas supersticiones, me parecía que escapaban de la lógica común, pero ¿qué lógica tenía yo en esa vida también, no? Bueno, fui, fui, yo era el jefe de la tropa. Dentro de la organización habían varias tropas y yo era el jefe de mi tropa, pero de mi tropa eh, no de la organización, ni en broma. Fui bien, fui valiente. La gente estaba atemorizada, la gente estaba blanquinosa, pálida, con miedo. Yo lo llamaba miedicas. Nos subimos y fuimos, tan felices, pero nos encontramos con que de repente aparece uno de nuestros compañeros y dice… Este compañero es especialmente intuitivo, era conocido como la persona más débil de la tropa, pero como gafe. Cuando él decía algo se cumplía. No hablaba nunca del futuro, pero tenía fama de actuar mediante una intuición y de repente dice:
-Vamos a morir todos.
Bueno, en fin, cómo se queda la gente. Se quedan todos helados. Yo le digo:
-Bah, tómate un descanso que debes de estar cansado.
De repente nos sacude algo y el capitán del barco -no de la tropa- dice que había algo que estaba sujetando el barco desde abajo, que nos estaba empujando hacia abajo. En pocos segundos estamos todos en el mar con una enorme tormenta y con una cabeza larguísima que asoma de debajo del agua, con unos dientes afiladísimos. Yo creía que estaba muerto, no podía creerme lo que estaba viendo, pero era una realidad. Vi delante de mis propios ojos cómo iban siendo devorados todos mis compañeros del pelotón. Me escapé como pude yo y otros cuantos más y logramos entrar en tierra. ¡El dragón! ¡El dragón de los mares! El dragón de los mares ya había desaparecido y la luz de la estrella ya volvía a lucir. ¿Qué había en una isla desconocida sin posibilidad de volver? Y bueno, a ver quién se atreve a echarse al agua con esa bestia, ¿no? Y a ver quién viene también a rescatarte, ¿no? Con esa bestia.
Interlocutor: ¿Esa bestia era una serpiente marina o así?
Ensirnom-El: Era algo así, pero tenía… Ahora que lo ubico sí, pero anteriormente solo vi una gran cabeza. Ahora lo ubico y es como que tiene tres cabezas y un cuerpo muy grande bajo el agua. Estábamos solos, para nosotros no era ningún problema sobrevivir, pero a ver, imagínate solo en una isla que no conoces ni nadie nunca ha explorado, ni nadie nunca ha puesto los pies. ¿Qué puede haber ahí dentro? Bueno, pues en el camino había una bestia en el agua, a saber qué te puedes encontrar dentro. Bueno, pues no había nada fuera de lo común. Animales para nosotros ya conocidos y poco más. Fue muy duro porque poco a poco nos intentábamos divertir pues como podíamos y nos fuimos matando los unos a los otros para nuestra diversión, por ese hobby nuestro. Hasta que quedamos poquísimos y nos fuimos matando, ya está. Fin de la historia. Por eso te digo, morirse de aburrimiento. Morirse de aburrimiento es tremendo.
Interlocutor: Fuiste como Robinson Crusoe en esa isla, vamos.
Ensirnom-El: Sí, me quiero retirar ya, pero ya, sin tener tiempo ni siquiera de hablar ni de consultar nada. Lo dejamos para la siguiente sesión porque al receptáculo lo he desestabilizado bastante con la historia, porque ha sido bastante fuerte y bueno, me siento un poco mal y he descargado encima y quiero dejarle descansar, no quiero ser cruel con él. Estamos en contacto ahora en dos minutos y me preguntas lo que quieras de la vida y seguimos si quieres con lo que tienes de la vida, pero prioriza descargar también.
Interlocutor: Vale, hasta luego.
Ensirnom-El: Hasta ahora.