La Atlántida

La Atlántida

Medium: Raúl Caballero

Entidad: Ro-El-Van, thetán de Raúl Caballero


 

Ro-El-Van: Estoy comunicado. Soy Ro-El-Van, del quinto plano de luz.

Había una civilización hace miles de años, que conocíamos como Bracantis aquellos que encarnamos en ella que vosotros conocéis actualmente como la Atlántida.

Fue una civilización próspera, una civilización con conocimientos, una civilización con avances, una civilización en que las personas que habitaban en ella intentaban prosperar cada vez más a nivel de civilización, pero dejando de lado toda la parte espiritual, preocupándose sólo de sus niveles de tecnología con respecto a otras razas, la neandertal, que también habitaban las tierras, con la cual no teníamos ningún contacto con ellos, para nada, estaban prácticamente a punto de extinguirse.

En cambio la civilización de la época estaba muy avanzada a nivel tecnológico, y a nivel de investigación. Investigaciones con muchos tipos de energía, energías que provocaban una mejoría total en la ciudad, cúpulas que aislaban de los cambios climáticos, tecnología de aparatos teletransportadores y desmaterializadores, aparatos de antigravedad, aparatos que proyectando un destello de luz de energía podían provocar cortes perfectos en algunos materiales, cristales muy avanzados, los cuales podían almacenar información como si de libros de hoy en día se tratara, que almacenaba todo tipo de información, cristales energéticos que también captaban la vibraciones de la tierra, de la corteza terrestre, en el cual se podían detectar terremotos, perturbaciones, o anomalías dentro de la propia isla por culpa de las investigaciones con energía lumínica.

La gente creía totalmente en el karma fatalista, no buscaban prosperar espiritualmente, éramos personas generalmente de planos densos, cuyas únicas personas elevadas eran aquellas que buscaban hacer prosperar la civilización, con el hacer prosperar descubriendo cosas importantes para hacer prosperar la civilización en sí, con sus habitantes. Todavía otro tipo de gente, de tipos de gente, que directamente se preocupaban de sí mismos, se preocupaban también de forma colectiva, que creyendo en ese karma fatalista estaban ahí por algo, y que no iba a servir de nada, porque si estaban allí era por un castigo divino. Lo importante para ellos era la tecnología que había en la ciudad. Pero también los poderes divinos sin entender el verdadero Dios, o el verdadero significado del amor de Dios.

Sólo una persona de la época pensaba en el mundo espiritual, a pesar de no tener conocimientos sobre él. Y aportaba más, y más las enseñanzas espirituales, pero desde una intuición. El espíritu de esa persona se llama Domanisel, y su nombre físico era Lorelei en esa época, física-astrónoma de la que ya se ha hablado tantas veces.

Nosotros teníamos un conocimiento elevado sobre lo que era astronomía y todo lo que era movimientos estelares, todo lo que eran movimientos planetarios, pero aún así no poseíamos suficiente tecnología para viajar entre mundos, pero sí que teníamos, o habían tenido los antecesores, más que nosotros en la época de hace 24.000 años, con una raza extraterrestre de la época que pasaban tecnología de forma importante para poder construir enormes edificios de cristal, cristalinos, una enorme ciudad cristalina para construir un tipo de columnas en concreto, para poder construir un tipo de edificaciones. Materiales para mejorarlos, materiales para mejorar en la investigación. Todo era para aportar, para aportar.

Lo más importante de todo era que la gente de la época no entendíamos lo que realmente era el servicio en sí, pensando sólo en nuestra civilización, olvidándonos que había otras civilizaciones en el resto del planeta, Sol 3, en la cual estaba aislada, sin posibilidades de prosperar, sin tecnología alguna, pero nosotros preocupándonos sólo de nosotros mismos y teniendo vehículos voladores que nos podían acercar al Continente en cuestión de pocos minutos… Aun así no ayudábamos a la gente del exterior, sino que nos encerrábamos en nuestra pequeña isla egocentrista, pensando únicamente en nuestra propia civilización, que ya poseíamos una gran conocimiento tecnológico, y para nada conocimiento ético, espiritual, o moral.

Gracias por escucharme.


Enlaces de interés

El misterio revelado de la Atlántida – Tetra-El.org

Sobre Raúl Caballero 552 artículos
Especialista en Psicología Transpersonal y Psicoterapeuta Cognitivo Conductual. Más de 15 años de experiencia en el campo de la mente humana y en el campo esotérico y la mediumnidad.